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Todo lo que dice esta clínica de podología sobre los pies planos y sobre los zapatos es cierto y lo he leído en una guía que tiene casi 30 años.
Te cuento.
Estos días anda Ángel (de ZaMi) de limpieza en un piso para reformarlo. Y entre libros antiguos, carpetas, libretas usadas, lámparas rotas y un largo etcétera de cosas que se guardan y que nunca hacen falta, encontró un folletín tipo librito.
Nada más verlo, su nombre le llamó la atención: Conozca sus pies.
Lo leyó por encima y a la mañana siguiente me dice:
Tengo una cosa para ti que te va sorprender.
Me lo soltó así, de esa forma, con tanto misterio, que pensé… ¿habrá descubierto la pócima de la eterna juventud?
Sacó de su mochila un librito y lo puso encima de la mesa.
Se trataba de una guía escrita en 1995 por un centro podológico.
Para poner en contexto el paso del tiempo suelo recordar cosas importantes de ese año. En mi caso, empezaba los estudios en la Universidad de Córdoba. Iba para veterinario, pero la nota no me dio y me quedé en químicas.
Pues han pasado 28 años de esa guía, pero lo que dice vale ayer, hoy y mañana.
Atento:
“Desarrollados para tener flexibilidad y resistencia, poco a poco las civilizaciones han ido sometiendo a los pies de la peor forma posible, esto es, encerrándolos en el calzado. Ello es debido a que, en general, se adquiere el calzado sin tener en cuenta que éste es para los pies y no para la vista.
El ser humano se calzó hace algo menos de 4000 años y lo hizo para protegerse del frío. Actualmente debemos también protegerlo del pavimento y, lo que es peor del, propio calzado.
Si sobre un papel dibujamos el perímetro de nuestros pies es fácil comprobar, al recortarlo, que no nos cabe en ningún calzado de los que usamos habitualmente.
La moda actual de usar calzado deportivo como calzado de diario es consecuencia de la búsqueda de la comodidad, pues su gruesa suela y su flexibilidad hacen que los pies se sientan más protegidos, también su anchura en mayor y, por ello, más adecuada.”
Y ahí no queda la cosa. Mira lo que dice sobre los pies planos.
“No es verdad que sólo existan pies planos, pies cavos (arcos excesivamente elevados), pies zambos (completamente deformados) o pies normales.
Debe desecharse estos conceptos arcaicos.
El pie plano es una consecuencia, no es una causa.
El pie puede aplanarse por diferentes motivos y el diagnóstico deberá hacerse a partir de la causa que lo provoca.
Decir “tiene pies planos” es equivalente a decir “tiene dolor de cabeza”, si, pero ¿por qué?
La respuesta esta pregunta es la causa de la alteración.
Así pues debe decirse, se manifiestan tal y cual alteración que comportan un aplanamiento del pie.
Lo que sí podemos afirmar es que los pies son para las personas lo que los cimientos a una casa o las ruedas a un coche.
Cualquier fallo en los cimientos hace que todo lo que esté encima de ellos sufra las consecuencias,…acuérdate de la Torre de pisa….”
Bueno, bueno, bueno… la relación es directa:
Resumiendo:
Groundies, para empezar la casa por los pies.
Tu salud empieza en ellos.
Antonio Caballo.
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