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‘Es como si quieres comer sano y solo tienes MacDonalds a tu alrededor.’
Lo que cuenta Cristina es una realidad que es difícil de ver.
Dicen que para verlo tienes que tener amplitud de miras, la mente abierta o capacidad de lógica.
Y a veces ni eso basta porque la energía para tu día a día es limitada, y con el quehacer diario ya la tienes gastada.
Por lo que pasan los días aceptando todo lo que ves como lo único y verdadero. Y cuanto más lo ves, más verdadero parece.
Aquello de ‘Una mentira repetida mil veces se convierte en una verdad.’
Y algo así le pasó a Cristina.
Dice:
'Tengo un hijo de 3 años que, al igual que a mi, nos encanta estar descalzos. En casa siempre lo estamos, y también cuando jugamos en un parque de arena.
Desde pequeño nunca tuvo zapatos hasta que empezó a caminar porque he sido consciente de que no era bueno para su desarrollo.
Luego le hemos ido comprando zapatillas que parecían que cumplían con su buen desarrollo. Se las probaba, corría por la tienda y él mismo decía cuáles eran “más rápidas”.
Pero hace unos días me di cuenta de que tenía un poco rojo en los dedos pequeños.
Y entonces sonó la alarma en mi cabeza y me di cuenta de que eran zapatillas normales, no eran estrechas pero tampoco anchas.
Y me ha dado rabia, porque yo tengo unas zapatillas Merrell minimalistas que son con las mejor que voy y no me duele nada.
He pensado en ello, al leer las historias que me mandas, y me he dado cuenta de que lo otro es lo más fácil, que lo difícil es comprar calzado minimalista porque no te lo encuentras por la calle.
Es como si quieres comer sano y solo tienes MacDonalds a tu alrededor.
Creo que por lo menos estamos a tiempo. Yo de decidirme plenamente por el calzado minimalista y a él por inculcarle que tenga unos pies sanos para el resto de su vida.'
Resumiendo.
Aunque su hijo estaba descalzo en casa y en el parque, el calzado convencional le causaba daño a su hijo.
El zapato que venden en las zapaterías NO es ancho; estruja tus dedos y los de tus hijos.
Ni Nike, ni Adidas, ni Biomecanics, ni Chicco, ni Gorila,…
‘Si quieres comer sano no vayas a un sitio donde sólo haya MacDonalds.’
Aquí: zapatos anti-MacDonalds para el colegio.
La salud empieza en sus pies.
-Antonio Caballo.
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