Si no quieres hacerte viejo, saca pecho y mira al frente

Hace unos días en el paseo marítimo de la Carihuela vi algo que tiene que ver con la postura al correr y con hacerse viejo.

Te cuento.

Era primera hora de la mañana y cientos de personas hacían actividad.

Unos andando y otros corriendo.

Es una típica imagen veraniega que año tras año se repite.


Me fijo en los que corren.

Me cuesta encontrar uno derecho.

Todos se inclinan desde la cintura.

Algunos de forma exagerada.

Si dan un traspié, seguro que clavan la cabeza en el suelo.

Como la Torre de Pisa, pero en movimiento.

Miro sus pies.

Todos usan zapatillas con tacón.

O drop, si prefieres la palabra técnica.

Y a más tacón, más inclinación.

La relación es directa.

Aquí no acaba todo.

¿qué hacen cuando terminan de correr o andar?

De las zapatillas pasan al móvil.

Más inclinación.

En este caso desde el cuello.


¿Y si te deprimes?

También te inclinas. Sobre ti mismo, buscando tu propio refugio.

Más joroba.

Como el de Notredame, pero con móvil.

Todo deriva a perder tu rectitud.


Situaciones diferentes, pero el mismo resultado.

Perdemos la verticalidad y tendemos hacia la inclinación, hacia la vejez.


Sigo en el paseo marítimo contemplando a la gente que corren.

No puedo ver ningún pie, van ocultos dentro del calzado.

Ni nadie corriendo descalzo o con zapatillas minimalistas.

Ha pasado más de media hora y ya no me queda café. La chica de la barra hace tiempo que me mira con cara de:

"si no vas a consumir, deja la mesa libre."

Me siento incómodo y hago el ademán de levantarme.

Y de pronto lo veo.

Todo pasa muy rápido.

Me quedo inmóvil, como si hubiera visto un fantasma.

Pasa a buen ritmo, con una alegre cadencia de pasos.

El torso recto desde las caderas.

Sin inclinación.

¿Y de calzado?

Unas sandalias.

Sin tacón.

Minimalistas.

Unas huaraches.

No sé con exactitud si eran las Enix 080

o las Pies Sucios Simna Zip

Pero eran planas o con drop 0.


¿Quieres ser más joven?

No te inclines por la cintura.

No dobles el cuello, ni el torso.

Te haces viejo cuando lo haces.

Y cuando corras o camines hazlo con zapatillas sin drop.

Una persona vieja con una postura recta al caminar es menos vieja.

La salud empieza en tus pies.